lunes, 12 de octubre de 2009

EL MITO TORRIJISTA Y EL PRD

Mientras las leyendas son narraciones de las tradiciones de los pueblos basadas en hechos reales, los mitos son basadas en invenciones y fábulas, no son reales, no corresponden a la verdad.

Mediante esta construcción espontanea de la antigüedad, eran atribuidos poderes sobrenaturales y maravillosas hazañas a héroes de carne y hueso. Los mitos modernos son creados intencionalmente para perpetuar una mentira, se sostienen de argumentos ideológicos repetitivos y la “propaganda” tales como los utilizados por Goebbels a favor de Hitler.

No hay justificación para el golpe de estado dado al Doctor Arnulfo Arias Madrid. El mito torrijista pertenece a este último distintivo y fue creado por la llamada “Tendencia”, único bastión ideológico de la soldadesca armada, posterior al 11 de octubre de 1968, por lo que se hace necesario, recordar para la historia 4 cosas importantes.

Primero, Omar Torrijos no participo del golpe de estado. Innumerables testimonios corroboran que estaba totalmente borracho, beodo, inconsciente a tal grado que hubo que utilizar mucho café y cachetadas para despertarlo. La impronta octubrina fueron sus autores materiales Boris Martínez, Amado Sanjur, Fred Boyd, Nenzen Franco y otros de menor jerarquía, y los intelectuales, los estamentos de seguridad estadounidenses, como en todo el resto del continente.

Segundo, Torrijos entran al escenario siendo una fichita de los gringos y es posterior, a 1969, que dirige el país en compañía de Manuel Antonio Noriega, el encargado de la seguridad del estado, cuando empaquetan en un avión hacia Miami a Boris Martinez y a los verdaderos golpistas. Esto es lo que se conoce como el contragolpe, al cual le han inventado por igual una serie de mentiras intencionadas. De allí que no hay torrijismo sin Noriega, como burdamente ha intentado ellos de desligarse de esta verdad de a puño.

Tercero, al igual que los panameñistas alzados en armas en contra del golpe, los cuadros comunistas, estaban privados unos y exiliados otros. Estos últimos no aguantaron ni meses ni en las cárceles, ni en el exilio, así que negociaron con los golpistas su pronto retorno al país y ocuparon de inmediato puestos importantes en el nuevo gobierno.

Cuatro, fueron estos cuadros ideológicos quienes inventaron todo el lenguaje social que arropo a la dictadura y le dieron forma a ciertas políticas a la que llamaron “proceso revolucionario”. Su tarea más importante fue reinventar la historia a punta de falsedades e inexactitudes y se merecen todo el crédito por ello, pues hoy en día tenemos a un aproximadamente 31% de la nación que cree en el mito del mal llamado “torrijismo”.

Años más tarde, estos “comunistas” amantes más de los dólares y no de los rublos, se fusionarían con liberales y burgueses de viejo cuño, en el conocido brazo político de los militares, el PRD. Todo un mundo de oportunidades se abrió para los que les hicieron la venia a los militares, administrando sus negocios, amasando fortunas a manos llenas, en un momento en que el dinero de los préstamos fluía a raudales. Es fácil verificar esto en el deplorable estado que quedo la nación, posterior a 1989.

Se hace urgente y necesario que el Ministerio de Educación, a través de los historiadores nacionales y las personas que aún sobreviven y son testimonios vivos de lo sucedido, empiece el proceso de desmitificación de nuestra historia a partir de 1968 y plasme solo la verdad objetiva en los textos escolares de nuestros niños (ver artículo relacionado "EL MAYOR GIROLDI Y LA ACTIVIDAD ENEMIGA" en http://panamapolitica.blogspot.com/.

domingo, 4 de octubre de 2009

GUILLERMO ENDARA EL GRANDE

Guillermo Endara nos ha enseñado a todos grandes lecciones. Endara representa coraje, humildad, nobleza, honestidad, valores consecuentes de una vida dedicada al servicio público.

Con coraje se repelía el ataque inmisericorde de la soldadesca. El viernes negro es recordado por muchas familias. Ese día nuestros hermanos fueron a parar con sus huesos a la temible Cárcel Modelo. Cientos de prisioneros de conciencia. En aquellos tiempos, el noriegato tenia a todo un país en vilo, en una atmósfera dantesca, las batallas se escenificaban en las calles.

No fue mejor para nuestro héroe. Las vivas imágenes de un Endara bañado en sangre, Arias Calderón siendo atacado por batalloneros, y un Billy Ford tirando puñetes enfrentado a un enemigo numeroso compuesto por codepadis y copacobrids armados y repartiendo varillazos, hizo lucir al régimen como cobarde e inhumano.

Endara tenía tan buen humor que se vacilaba a sí mismo. “Pan de Dulce” apodo que con burla le fue impuesto durante la campaña, fue convertido por él en un cariñoso apodo, que demostró a los funcionarios que caricaturas, apodos o reventaderas, no tienen porque socavar la grandeza de un hombre humilde.

A pesar de su triunfo arrollador al igual que al Doctor Arnulfo Arias Madrid en un momento, le negaron la Presidencia. Luego vendría la invasión. Guillermo “mírame a la cara, nunca te he mentido” Endara fue de una nobleza y honestidad incomparable. Nadie nunca siquiera puede osar decir que se robo un peso.

Quienes tienen que estar en mayor medida agradecidos con su noble carácter son sus adversarios políticos, el PRD. En un momento en que Endara contaba con todo el poder en lugar de aplastarlos como muchos pedían y querían, los perdono. Él permitió que el PRD se recuperara e hiciera oposición para el buen equilibrio de los poderes. Esto no fue del agrado de algunos que no comprenden el correcto arte de gobernar.

La grandeza de Endara se ve reflejada desde su discurso ante la tumba del Doctor Arias y le llama “El Grande”, disminuyéndose el mismo y dándole paso a quien merecía esas atenciones en su momento, contrasta con aquellos que creen ser el centro del universo y piensan que los puestos son eternos.

La grandeza de Endara se ve reflejada hace poco, cuando en un acto de perdón sin precedentes se reconcilio con Arias Calderón, ambos sabiendo que le quedaba poco tiempo.

“Servir hasta el sacrificio” no era un simple eslogan de campaña, fue una realidad permanente. Eso explica porque en su funeral la gente durante el trayecto lo ovacionaba, y agitaba pañuelos blancos, evocando aquellos tiempos de lucha extrema por la democracia, entendiendo que este héroe representaba todos aquellos valores.

Endara es grande hasta en su muerte. Él reconcilio a la nación entera y al Partido Panameñista. Dios quiera que por un Panamá mejor, nuestros actuales gobernantes aprendan estas lecciones humanas y políticas imperecederas.